La Santísima Virgen de la Esperanza Macarena ya se encuentra en el camarín de la Basílica, tras el Besamanos celebrado en la Parroquia de San Gil Abad, con motivo del primer centenario de que la Virgen estuviera expuesta a la devoción de su fieles, con gran asistencia de público durante los cuatro días a pesar de las inclemencias del tiempo.
Se trata de la segunda vez que la viste su nuevo vestidor, el jerezano José Carlos Gutiérrez, quien nuevamente ha sabido plasmar su buen hacer sobre la Bendita Imagen, que en esta ocasión luce la saya crema, diseñada por José Guillermo Carrasquilla con bordados procedentes del paso de palio que bordara Juan Manuel Rodríguez Ojeda en 1908, así como el de Victoria Caro de 1941. La pieza, con soporte de tafetán, fue realizada en 1967 por el taller de Nuestra Señora de la Esperanza.

Del mismo modo, porta el manto de camarín rojo, también conocido como de los Sánchez-Dalp, inspirado en una pieza neoclásica del siglo XIX y completa el atavío la toca de sobremanto bordada por Fernández y Enríquez, en 1989, inspirado en un diseño de Antonio Garduño.
