El 12 de octubre, día de la Fiesta Nacional de España y de la patrona de la Hispanidad, la Virgen del Pilar; la Esperanza de Triana continuó con la Misión organizada con motivo del Año Jubilar de la Esperanza por el Polígono Sur, con su traslado desde la parroquia de Pío X en el barrio de Las Letanías, hasta la de Jesús Obrero, donde la casa Bendición y Esperanza, regentada por los salesianos, lleva a cabo una labor encomiable en esa zona tan deprimida de Sevilla.
Las andas que están sirviendo para los diferentes traslados de la Esperanza durante este mes de octubre, se pusieron en camino buscando su nuevo destino a las 9:30 horas, tomando por el siguiente itinerario; Madre del Creador, Reina de los Ángeles, avenida de las Letanías, Madre de Cristo, El Principito, Platero y Yo, La Colmena, Juan de Mairena, Padre José Sebastián Bandarán, llegando a la parroquia de Jesús Obrero en torno al mediodía.
Durante el recorrido se fue rezando el Santo Rosario, mostrando instantes de grandes muestras de piedad popular, tal y como quedó patente en las ponencias del II Encuentro de Piedad Popular que se celebró en Sevilla el pasado diciembre. Este traslado a Jesús Obrero, en el que la Virgen visitó la zona sur de la ciudad, dejó ver claramente cómo la Bendita Imagen fue recibida como un soplo de Esperanza para la gran cantidad de fieles y devotos que la acompañaron y para los que la estaban esperando, algunos desde hace años que no la veían y todo rodeando por grandes momentos de oración y recogimiento.
El próximo traslado de la Virgen en este mes plagado de Esperanza, será el sábado 18 de octubre cuando salga desde la parroquia Jesús Obrero a las 8:15 horas, recalando en el Hospital Infantil Virgen del Rocío, donde también su presencia hace mucha falta; para llegar finalmente a la Capilla de los Marineros sobre las 16:30 horas.
Concluirán así los actos de la Misión de la Esperanza, pero no será el final de los traslados de la Virgen, ya que será llevada a San Jacinto y posteriormente a la Catedral, donde se conmemorará con un besamanos, un triduo y una misa estacional, el LXXV aniversario de la declaración como Dogma de Fe de la Asunción de la Santísima Virgen a los Cielos en Cuerpo y Alma; que tendrá como colofón el regreso a su sede de la calle Pureza el 1 de noviembre, en una procesión de alabanzas.
