‘El Cachorro’ de Sevilla y la Virgen de la Esperanza de Málaga, han dejado estampas históricas durante la Gran Procesión por el Jubileo de las Cofradías que ha recorrido este sábado las principales calles de Roma. El itinerario ha discurrido por emplazamientos tan emblemáticos como el Coliseo, el Arco de Constantino y el Circo Massimo.
La procesión se inició con la salida de la Hermandad del Santísimo Sacramento Mafra, de Portugal, con su Cruz Patriarcal abriendo el cortejo con un Crucifijo del siglo XVIII; le siguió la Archicofradía Vaticana de Santa Ana de los Palafreneros Ciudad del Vaticano, con un cuadro de Santa Ana con la Virgen (Arturo Viligiardi, 1927); y la Cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno, de León.

A continuación, ha estado representado el Priorato Ligur de Cofradías Génova (Italia) con dos crucifijos portados de forma vertical (siglo XVIII) y la Archicofradía de La Sanch Perpignan (Francia), con el crucifijo ‘Le Devot Christ’ (siglos XIII-XIV); y la Cofradía de Maria Addolorata Enna (Italia), mediante la Virgen de los Dolores (Luigi Felice, siglo XVIII).
Con un estricto horario, a las 15:00 horas el Cristo de la Expiración salía de la carpa donde fue trasladado en la tarde del viernes desde la Basílica del Vaticano. Media hora después lo hacía la Esperanza de Málaga. Ambas imágenes han sido las grandes protagonistas de la jornada asombrando a Roma y al mundo por la majestuosidad de sus tallas.

Tras esta procesión, el domingo tendrá lugar la celebración litúrgica con la que León XIV iniciará su pontificado en la Plaza de San Pedro a partir de las 10:00 horas, aunque finalmente ambas imágenes no presidirán este acto y desde esta misma noche comenzarán los trabajos de desmontaje para regresar a Andalucía.
