Cuando se supo que el cardenal Prevost, sería el Papa León XIV, todo el mundo comenzó a buscar datos sobre su formación, sobre su vida pastoral, su vida personal, sus aficiones o cualquier otra cosa que nos acercara a quien va a dirigir los designios de la iglesia de ahora en adelante.
Uno de los aspectos más destacados de la vida episcopal de Robert Francis, cardenal Prevost, es que fue nombrado superior de la orden de los Agustinos en 2001, hecho altamente significativo ya que se trata de una orden religiosa extendida por todo el planeta. Actualmente cuenta con su presencia en cincuenta países.

El nacimiento de la Orden de San Agustín se remonta al año 1243 cuando cuatro ermitaños, Esteban de Cataste, Hugo de Corbaria, Guido de Rosia y Pedro de Lupocavo en representación de grupos de eremitas situados en el Lacio acudieron a Inocencio IV para pedirle una regla común y un prior general.
Se da la circunstancia que el actual Santo Padre, siendo superior de la orden agustina firmó la Carta de Hermandad entre la cofradía del Santo Crucifijo con los Agustinos, documento que cobra una relevancia imprevista, ya que cuentan nada más y nada menos que con un rúbrica del Papa.